En la sima de mi ciénaga

Escupiré a los transeúntes que deambulen por mis aceras
Maldeciré a los infortunios y a los hechos
Y a todas esas gentes que tratan de asesinar quimeras e ilusiones
Sin más que hacer sin más que decir me hundiré en mis locuras de mierda.

Harto de toda esta mierda deseo solo volar a mi ciénaga
Sumergirme en ella y abrazar a las bacterias y escuchar su ópera bacteriana
Cantarle a la oscura noche de primavera y danzar en medio de su universo-ni universo-
Regalarle ofrendas a la Luna y masturbarme día y noche junto al sol
Sin más que hacer y decir decido, por última acción, lanzarme al espacio inmenso de vacuidad.
Alejarme quisiera de toda esa mierda. Sí. De toda esa mierda….ya no he de estar jamás con los anodinos y deplorables, monstruos de la verdad.
Le doy mi cuerpo a las larvas del umbral para que devoren mi ser existente; y a la tierra le regalo mi suspiro y grito que pide a gritos irse.
Y en medio del pantano enmohecido por la humedad, las hojarascas intentarán no caerse de mi fúnebre cuerpo; porque la verdad es que ya perdí el mello.

Mis brazos ya no soportan la gelidez del verano, ya no aguantan mis sonrisas en sus gélidas manos infaustas y tenebrosas
¡No sé como llamar a toda esta mierda que pasa…!

Seguiré esperando ser abrazado-por la Luna o la estrella- aunque ya perdí las esperazas de creer en mí- sentado acá reiré por unos instantes eternos a luz de mi pantano ,lúgubre y timorata ,sonreiré a la nada.

….Y mis brazos de hierro no podrán nunca acariciar las cimas de las beldades; infausto seré toda la vida.


Perteneceré por siempre y eternamente a la sima de las encrucijadas (os).